Todo lo que escribo, todo lo que soy te lo debo a ti. Perdóname si alguna vez no te demostré que en el silencio te he querido más que a nadie en este mundo.. Sé que no lo sé, no llego a ver lo que me quieres. Pero esta vez deja que diga a voz en grito que tú eres mi luz, el que ilumina la agonía cuando estoy lejos de ti.
Y por si no vuelvo a verte te diré que eres mucho más de lo que yo soñé.
Reconozco que eres parte de mí, que no puedo estar sin ti..